Centros de Profesores

La primera infancia se considera la fase de desarrollo más importante de todo el ciclo vital. Es un periodo fundamental en la construcción del ser humano, de sus competencias, habilidades y de su manera de relacionarse con el mundo.

Durante la niñez se llevan a cabo importantes procesos de maduración y aprendizaje que les permitirán interactuar, integrarse y desarrollarse al máximo como persona, por lo tanto, el sano y seguro desarrollo infantil está estrechamente relacionado con la disminución y prevención de problemas tanto fisiológicos como psicológicos que pueden intervenir en el sano desarrollo, incluso derivando en problemas de aprendizaje y de acceso al currículo académico.

Por tanto, la prevención, detección e intervención a tiempo de dichas alteraciones puede resultar de gran trascendencia. Por ello, promocionar la salud y poseer herramientas para prevenir, detectar e intervenir en situaciones que puedan poner en riesgo la integridad física, psicológica y cognitiva es esencial para los docentes que realizan su labor en estas etapas. Conocimientos en nutrición o detección temprana de alteraciones sensoriales, entre otros, es información que cobra especial relevancia cuando se vela por la salud y el bienestar en el alumnado de cortas edades.

1. Detectar precozmente problemas sensoriales.
2. Detectar situaciones de riesgo y problemas relacionados con la salud.
3. Promocionar los hábitos de vida saludables.
4. Potenciar el cuidado de la propia persona.
5. Intervenir ante situaciones que puedan interferir en el correcto desarrollo del proceso de enseñanza-aprendizaje.

1. Detección precoz de situaciones de riesgo en el alumnado.
2. Pautas de prevención, detección e intervención ante situaciones de riesgo para la salud: enfermedades infectocontagiosas, accidentes, alteraciones oculares y auditivas, etc.
3. Hábitos de vida saludables.
4. Prevención de problemas de salud asociados a la alimentación.
5. La higiene y la actividad física como mecanismos de prevención.